Vista del Palacio Apostólico, residencia Papal en el Exilio
Villa María fue donada por una familia de fieles a la Iglesia. Consistía en parte de una antigua estancia. Tras la muerte del Papa León XIV, Monseñor Alejandro de la Compasión (hoy Papa Alejandro IX) se mudó a ese lugar con varios obispos y sacerdotes a fin de acondicionarlo. Cuando llegaron, estaba el viejo casco de estancia, derruído. Con maderas, paja y esfuerzo acondicionaron el lugar como capilla, instalándose en carpas donde dormían. Comían al aire libre apenas sí para reponer fuerzas y continuar con los trabajos de construcción de la capilla, salones, y demás edificios. Con la ayuda de muchos fieles, se adquirieron casillas prefabricadas que aceleraron el crecimiento de "Villa María".
Lo último que se construyó fue la casa en la que vive el felizmente reinante Papa Alejandro IX y que pueden apreciar en la foto.