sábado, 18 de mayo de 2013

Convocatoria al Sínodo de Villa María


MOTU PROPRIO 


NEMO VESTRUM IGNORAT


DE SU SANTIDAD ALEJANDRO IX
SIERVO DE LOS SIERVOS DE DIOS



POR EL CUAL CONVOCA AL SÍNODO DE VILLA MARÍA
EN LA SANTA SEDE EN EL EXILIO
PARA EL DÍA 23 DE JUNIO DEL AÑO 2013 DE LA GRACIA


Ninguno de vosotros ignora, venerables hermanos, que la Santa Iglesia Católica Apostólica Remanente, la Iglesia en el Exilio, atraviesa hoy uno de los momentos de mayor crisis en su historia reciente. Los poderes del Demonio se han conjugado en contra de la Barca de Pedro, del Arca de la Salvación y aquellos que juraban lealdad a la Silla Apostólica y a la roca de la Fe, no sólo defeccionaron, sino que además, movidos por el Padre de la Mentira, esparcieron todos tipo de infamias en contra Nuestra.

Como San Pablo podemos preguntarnos que si Dios está en contra de Nosotros ¿Quién se levanta en contra nuestra? La respuesta es evidente, y por ser evidente muchos se han negado a aceptarla. Pero eso no puede continuar, queridos hermanos en el Señor: el Demonio, Satanás ha puesto sus garras en la Iglesia y con el ánimo de destruirla, ha conseguido para sí a muchos.

En vano esperábamos un año tranquilo, en vano esperábamos, como lo anunciamos en el Tercer Sínodo de Mar del Plata un año de crecimiento sostenido, de regularización de las misiones, de importantes avances en la reconstrucción jurisdiccional, uno de los objetivos de Nuestro Pontificado. En vano, decimos, porque no esperábamos que aquellos a los que confiamos tan altas responsabilidades nos traicionaran de una manera tan hartera y tan vil, arrastrando con ellos a todo un país al cisma y a la herejía. Hoy, podemos señalarles y llamarles por el nombre que merecen: anticristos, amantes del mundo, siervos del Demonio.

De haber existido justicia en ellos en algún momento, sus dudas y sus reclamos se hubieran formulado, empero, amparados en la traición, decidieron actuar de manera subrepticia. Ellos, los enemigos de la Iglesia, se congregaron y realizaron reuniones en secreto, se escribieron, se llamaron siempre a escondidas. Ellos, los enemigos de la Iglesia se ocultaron de la Luz, a la que odian.

Se ha hecho conocido un nombre, quizás, el del instigador de ésta rebelión que se extendió entre otros clérigos. Nos referimos a Vladeci Pereira Sarmento, quien fuera conocido como Makarios, el Catolicós de la Iglesia Católica Sirio-Malankara. Él, enemigo de la Fe de Cristo, ha decidido destruir a la Iglesia, y hoy continúa diciendo mentiras, acusándonos, no sólo de fasa Iglesia, sino de ser un mero partido político. Estas mentiras, que no merecerían ni ser recordadas, no tendrían ningún valor si no fuera por el intenso movimiento que ha despertado en muchos otros.
Es por ello, y a fin de temrinar con estos males profundos, extirpar las calumnias, reorganizar el clero y afrontar esta nueva situación, hemos decidido convocar a todos los Obispos de la Santa Iglesia Católica a la Santa Sede en el Exilio, en Villa María, a un Sínodo Extraordinario. El dicho Sínodo se iniciará el día Domingo 23 de Junio del Año 2013 de Nuestro Señor Jesucristo y se extenderá tantas sesiones como sea necesario.

El fin de dicho Sínodo será analizar la nueva situación en la que se encuentra la Santa Iglesia Católica tras la defección de Vladeci Pereira Sarmento y de tantos otros que, sin haber llegado a las posiciones de poder que él, hacen gran daño a la Iglesia de Dios, llevandose a cuantos pueden al sendero de la Muerte Eterna.

Ordenamos y establecemos que en un plazo no mayor a diez días a partir de la publicación de éste, Nuestro Decreto, los Cardenales, Patriarcas, Primados, Arzobispos, Obispos, Vicarios y demás miembros de la jerarquía católica se comuniquen a con la Secretaría de Estado a fin de confirmar su asistencia y fecha de llegada. Ordenamos igualmente que no se tenga en condideración a los gastos que sean necesarios para el traslado de los prelados, ya que la situación exige medidas urgentes.

Todo esto lo mandamos y decretamos por Nuestra Apostólica Autoridad,

Con Nuestra Bendición Apostólica,
Alejandro IX
Siervo de los Siervos de Dios.

Dado en Villa María, Santa Sede en el Exilio.
A los XVIII días del mes de Mayo, Año MMXIII de Nuestro Señor Jesucristo,
IV de Nuestro Pontificado