domingo, 10 de julio de 2011

Decreto Decessorum Nostrorum

Nos, Alejandro IX, siguiendo el ejemplo de Nuestros Predecesores declaramos que el gran Agustín, Obispo de Hipona, Doctor de la Iglesia debe ser considerado doctor infalible sobre la Gracia y la predestinación. Cualquier doctrina contraria a la enseñanza de San Agustín no debe ser enseñada a los fieles y menos aún en los seminarios y casas de estudio.

Dado en Villa María, a los 30 días del mes de junio,
Año MMXI de la Gracia
III de Nuestro Pontificado.