viernes, 4 de enero de 2013

Promulgación del nuevo Código de Derecho Canónico


El Papa Alejandro IX por medio del Motu Proprio "Principes Pacis" ha promulgado el Código de Derecho Canónico para la Santa Iglesia Católica Remanente. En el texto de Su Santidad, se realiza un importante análisis de la historia del Derecho Canónico, desde los primeros tiempos de la Iglesia hasta la Codificación en la época de San Pío X. El Papa analiza también las modificaciones introducidas por los Papas San Pío XI y San Pío XII y finalmente la gravedad de la situación de la Sede Vacante, extendida entre 1958 y el año 2006.
El nuevo código, como dice en la introducción, vale únicamente para la Iglesia Latina. Las Iglesias de Rito Oriental pueden utilizarlo como guía para su propia codificación, pero siempre, se mantendrán con su propia legislación histórica.
Se deja en claro que el Código había sido una iniciativa del Papa León XIV, un proyecto que, formulado en los consistorios e incluso en el Concilio de Moreno, jamás pudo ser ejecutado. Iniciado el gobierno del actual pontífice, varias normas y leyes fueron promulgadas, las cuales enmendaban y corregían las disposiciones del Código de 1917. Se plantearon, desde diversas diócesis muchas cuestiones, las cuales se debieron resolver pasando por sobre el Código. Todo esto fue planteado en el Primer y Segundo Sínodo de Mar del Plata, y correspondió a la última reunión de los obispos con el Santo Padre, insistir en la necesidad imperiosa de un nuevo marco legal que comprendiera nuestra actual situación. Fue por ello que el Papa Alejandro IX, luego de los grandes inconvenientes que sufrimos en el corriente año 2012 comisionó a una serie de canonistas la revisión de toda la legislación y el magisterio reciente, de las cuestiones planteadas por las diócesis de todo el mundo y, finalmente, del Código Pío-Benedictino.
El nuevo Código es más breve, contiene una menor cantidad de artículos, pero está mas focalizado. También el Santo Padre Alejandro IX deja en claro que, en caso de duda o asunto no tratado, debe seguirse la legislación histórica y el sentido de los canonistas.
El Santo Padre ha mandado a imprimir 300 copias del nuevo código, las cuales serán distribuidas entre las diócesis de la Iglesia Católica y otras quedarán en la Biblioteca de la Santa Sede en el Exilio.